domingo, 28 de mayo de 2017

GALLETAS PARA COMUNIÓN

Hola otra vez, esta semana traigo dos tutoriales muy sencillos, como siempre, de galletas. En esta ocasión las he utilizado para la comunión de un niño, aunque las podéis adaptar para cualquier celebración.


Esta es la primera galleta, como veis no tiene mucho misterio pero os pongo la imagen tutorial. He optado por hacerlas redondas ya que aunque no tengáis cortador lo podéis hacer con un vaso.


Lo primero es cortar un círculo de fondant blanco. Se pone sobre la galleta y con unas letritas o rotulador de tinta comestible ponemos el nombre del niño. Luego con unos cortadores de estrellas hacemos algunas de varios tamaños y con los colores favoritos del niño. Con un poquito de agua las pegamos a la galleta y listo. Más fácil imposible. También podéis optar por no hacer las  estrellas y  poner sprinkles con esa forma.


Esta es la segunda opción que os doy hoy. También muy facilita de hacer y con imagen tutorial.


Los dos primeros pasos son iguales que los anteriores. Pero esta vez en lugar de estrellitas he puesto banderines. Para hacerlos cogemos el color azul y yo en esta ocasión le he pasado un rodillo de texturas, pero no es necesario. Al verde, con un cortador de estrellitas, le he hecho un diseño. Y el color amarillo lo he dejado liso. Cortamos unos triangulitos y se ponen en la galleta. Para acabar y que parezca una guirnalda, con rotulador hacemos una línea por encima. Y acabada.

Esta vez no he hecho tarta pero si en vuestro caso sí la queréis hacer os doy una idea facilita. Ya que hemos hecho unas galletas con banderines, simplemente se cubre un tarta con nata o merengue y hacemos unos banderines de papel con los mismos colores que la galleta. Después los atamos a unas brochetas y las clavamos a la tarta. Veréis que rápido es de hacer, os pongo una de ejemplo, esta la hice para una mini mesa dulce, sólo hay que cambiar los colores de los banderines.




domingo, 21 de mayo de 2017

COMUNIONES A LA VISTA

Hola de nuevo, hoy os traigo la tarta que hice para celebrar el día de la madre, mi primer día de la madre. Fue muy especial para mi y me encantó pasar ese día junto a mi madre y mi peque, fue muy bonito. Estaréis pensando que a buenas horas publico esta tarta, que ya han pasado muchos días, pero es que pensé que os podría servir para una comunión. Así que si tenéis una hija, sobrina o amiguita que celebre estos días su comunión hacerle esta tarta y seguro que queda encantada.


Creo que es perfecta para una comunión por sus colores y detalles, además como siempre es muy fácil de hacer. El bizcocho es de vainilla y el relleno de ganache de chocolate. Para la cobertura utilicé merengue que le encanta a mi madre, pero también se podría hacer con nata, crema de mantequilla o cubrirla de fondant. Os recomiendo que la hagáis de los sabores favoritos de la niña.

Para los detalles de la tarta necesitamos fondant rosa y verde claritos. Yo no tenía, así que lo que hice fue teñir fondant blanco con colorante en gel. Es más entretenido que si lo compras hecho pero también es bueno para conseguir un color muy específico si es que no lo encuentras.


Simplemente hay que poner un poquito de colorante en el fondant con un palillo e ir amasando hasta que quede un color uniforme. En el caso del rosa intenté que quedara lo más parecido posible a una cinta de raso que iba a poner en la base de la tarta.



Con el fondant verde vamos a hacer los tallos y las hojas. Para los tallos sólo hay que hacer unos churritos largos, para que queden mejor acabados cortar las puntas con un cuchillo. Yo hice cuatro, pero al final sólo use tres. Mi tarta era de 15 cm de diámetro. Para las hojas cortar círculitos y con los dedos haced una puntita. Luego con un cuchillo haced las marcas de los nervios. Haced tantas como queráis poner.


Con el rosa se hacen las flores. Hay que cortar seis círculos, y ponerlos uno sobre otro. Luego pasamos una esteca o palillo por encima para marcar la mitad y lo enrollamos todo. Se corta por la mitad y se abren un poco los pétalos (vamos, que de una sacamos dos rosas). Por último le clavamos un palillo para que luego queden mejor fijadas a la tarta y no haya peligro de que se caigan.


Después hay que ponerlo todo en la tarta. Comenzamos por los tallos. Hay que ir poniéndolos de manera curvada y aleatoria por todo la superficie y laterales.


Cuando ya estemos contentos con el diseño, nos queda colocar las flores y las hojas. Flores puse ocho y hojas diez.


Para acabarla y dejarla perfecta sólo nos queda ponerle una cinta de raso alrededor de toda la base. Y ya tenemos lista una tarta preciosa y riquísima.

Si además queréis quedar ya como unos profesionales, podéis preparar para la niña o los invitados unas galletas a juego. Os he hecho dos versiones.


Las galletas son de margarina pero las podéis hacer con sabor a naranja, chocolate o lo que queráis. En esta ocasión no he utilizado glasa para decorar sino fondant porque las quería hacer muy sencillitas por si tenéis que hacer para muchos invitados.


Lo primero que hay que hacer es cortar con el mismo cortador que las galletas el fondant blanco. Para grabar el nombre he utilizado unas letras de plástico que compré en una tienda especializada pero también las he visto en un bazar. Sino podéis escribirlas con rotuladores de tinta comestible. Luego de la misma manera que hemos hecho las rosas, los tallos y las hojas para la tarta hacemos dos rositas, un tallo y dos hojas, eso si con un tamaño mini. Luego se coloca todo encima y ya tenemos una linda galleta para regalar.

La otra galleta creo que es aun más fácil de hacer. Tenemos que seguir sólo los dos primeros pasos y luego ir poniendo alrededor de la galleta corazones de azúcar.


También queda muy graciosa y a juego ya que lleva los mismos colores que la tarta.

Espero que os haya gustado esta idea y si tenéis alguna comunión estos días animaros a hacerla, y me contáis qué tal os ha ido. Y sobretodo disfrutad de la fiesta. Hasta la próxima entrada.